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Foto: I.V (VINISIMO) |
Os quiero hablar en esta ocasión de la cata del Clariano, reserva de 2012. Un espectacular tinto de las bodegas valencianas La Ribera, la cuales siguen adelante en su camino de elaboración de grandes vinos, con personalidad muy definida y fuerte carácter, para un público que sabe lo que quiere al adquirirlos. Una apuesta segura que nos llega desde Fontanars dels Alforins, en la D.O Valencia, que últimanente, se está revelando como sinónimo de innovación y calidad.
Este vino está elaborado con un coupage de las variedades Tempranillo, Merlot y Cabernet Sauvignon; en un original cambalache muy bien estructurado, y en un perfecto ensamblaje con la madera, que nos regala un vino potente, untuoso y con marcado caracter de terruño; que no deja en absoluto indiferente. Su graduación es de 14%.
Pasando a los aspectos derivados de su cata, a la vista se nos presenta de intenso rubí; con ligeros ribetes cardenalicios; y capa alta; casi opaca; de enorme elegancia.
En cuanto a la nariz, evoca en un primer contacto a una amalgama de frutos salvajes; recordando a arándano, cereza y sotobosque. Al agite va mostrando con elegancia aromas a tostados; y recuerdos de café; que se integran rápidamente con la barrica; en un conjuntp pefecto.
Por lo que a la boca respecta, es donde muestra todo su potencial. Su entrada es sencilla y limpia; con paso ligero y bien estructurado; y caracter en el primer sorbo.
Su paso es acompasado y sedoso a medida que se ingiere; y desarrolla un final frutal, a la vez que intenso; y de medio recorrido, permaneciendo bastante tiempo vivo en el postgusto.
En definitiva, un vino muy bien acabado y equilibrado; con un conjunto admirable entre taninos, frescura, frutalidad y madera; que está llamado todavía a darnos bastantes alegrías.
Vicente Montesinos